¿Cuál es la clave para conocer que Cristo es Dios encarnado?

Hace 2000 años, los fariseos judíos solo vieron que el Señor Jesús era un Hijo del hombre, que era muy corriente y normal, no conocieron Su esencia divina, por esto, blasfemaron y juzgaron que Él no era más que un hombre e incluso lo clavaron en la cruz, cometiendo un gran crimen. Sin embargo, Pedro, Juan, Mateo y Natanael, y así sucesivamente, pudieron reconocer que Él era el Mesías prometido por medio de Sus palabras y obras, y lo siguieron, por lo tanto, obtuvieron Su salvación y creyeron firmemente en que Él era Cristo, era Dios encarnado. En resumen, la capacidad de conocer a Dios encarnado está directamente relacionada con que si nuestra fe en el Señor puede ser aprobada por Dios.

El Señor Jesús dijo: “[…] El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; […] Creedme que yo estoy en el Padre, y el Padre en mí […]” (Juan 14:9-11). “Yo y el Padre somos uno” (Juan 10:30).

Dios Todopoderoso dice: “El Dios encarnado se llama Cristo y Cristo es la carne que se viste con el Espíritu de Dios. Esta carne es diferente a cualquier hombre que es de la carne. La diferencia es porque Cristo no es de carne y hueso, sino que es la personificación del Espíritu. Tiene tanto una humanidad normal como una divinidad completa. Su divinidad no la posee ningún hombre. Su humanidad normal sustenta todas Sus actividades normales en la carne mientras que Su divinidad lleva a cabo la obra de Dios mismo. Sea Su humanidad o Su divinidad, ambas se someten a la voluntad del Padre celestial. La esencia de Cristo es el Espíritu, es decir, la divinidad. Por lo tanto, Su esencia es la de Dios mismo […]”.

“Investigar algo así no es difícil, pero requiere que cada uno de nosotros conozca esta verdad: Aquel que es la encarnación de Dios tendrá Su esencia, y Aquel que es la encarnación de Dios tendrá Su expresión. Haciéndose carne, Dios traerá la obra que debe hacer, y haciéndose carne expresará lo que Él es; será, asimismo, capaz de traer la verdad al hombre, de concederle la vida, y de mostrarle el camino. La carne que no contiene la esencia de Dios seguramente no es el Dios encarnado; de esto no hay duda. Para investigar si es la carne encarnada de Dios, el hombre debe determinarlo a partir del carácter que Él expresa y de las palabras que Él habla. Es decir, si es o no la carne encarnada de Dios, y si es o no el camino verdadero, debe discernirse a partir de Su esencia. Y así, para determinar[a] si es o no la carne de Dios encarnado, la clave está en prestar atención a Su esencia (Su obra, Sus palabras, Su carácter, y mucho más), en lugar de fijarse en Su apariencia exterior. Si el hombre sólo ve Su apariencia exterior, y pasa por alto Su esencia, demostrará la ignorancia y la ingenuidad del hombre”.

De “La Palabra manifestada en carne”

De las palabras de Dios, entendemos que Cristo es Dios encarnado, aunque Él tiene una apariencia exterior del hombre corriente, posee esencia divina y autoridad de Dios y puede hacer la obra de salvación del hombre. Tal como cuando el Señor Jesús vino, pudo dar sermones al hombre, echar fuera los demonios, hacer grandes milagros y perdonar y comprender el pecado del hombre, etc. ¡Estos son inalcanzables para un hombre corriente! Si el hombre puede conocer a Dios a través de las palabras que Cristo expresa, las obras que Él hace y el carácter que Él manifiesta, y dar cuenta de que todo lo que Cristo expresa es el carácter de Dios, el que Dios tiene y es, y ver las obras hechas por Dios encarnado y conocer la esencia divina de Cristo, no lo tratará como un hombre corriente ni será igual que los fariseos y judíos que crucificaron al Señor Jesús quien se parecía corriente y normal, acabaron cometiendo un crimen grave.

Scripture quotations taken from LBLA Copyright by The Lockman Foundation.

Recomendación: ¿Qué es la encarnación?